lunes, 21 de abril de 2025

Babygirl






Año: 2024
Duración: 114 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Halina Reijn
Guion: Halina Reijn
Música: Cristobal Tapia de Veer
Fotografía: Jasper Wolf
Reparto:
Nicole Kidman, Harris Dickinson, Antonio Banderas, Sophie Wilde, Esther McGregor, Anoop Desai, Victor Slezak, Maxwell Whittington-Cooper, Gaite Jansen...


Romy Mathis (Nicole Kidman) es una exitosa directora ejecutiva en el sector de la automatización industrial, que mantiene una vida aparentemente perfecta junto a su esposo Jacob (Antonio Banderas) y sus dos hijas.

Sin embargo, su rutina se ve alterada cuando inicia una apasionada aventura con Samuel (Harris Dickinson), un joven becario de su empresa. Este romance no solo pone en peligro su carrera y su familia, sino que también la lleva a cuestionar su identidad y sus deseos más profundos.





Copa Volpi a la Mejor actriz para Nicole Kidman en el Festival de Venecia 2024


National Board of Review (Asociación de Críticos Norteamericanos) 2024 a la Mejor Actriz para Nicole Kidman





Babygirl me ha dejado una mezcla de incomodidad y decepción y aque esperaba encontrarme con una historia provocadora y arriesgada pero me encontré con una película que no termina de definirse, que se queda atrapada entre el drama erótico, el thriller psicológico y un intento de cine intimista que nunca llega a cuajar.
Visualmente está bien, tiene una iluminación muy cuidada pero el problema es que detrás de esa fachada no hay mucho más. La historia se apoya en clichés que ya hemos visto mil veces: la atracción prohibida, la diferencia de poder, la mujer atrapada entre el deseo y la culpa y todo eso podría funcionar si se contara desde una perspectiva nueva pero siento que todo se queda en la superficie.
Nicole Kidman hace lo que puede, su talento es evidente pero el guion no le da espacio para desarrollar su personaje y está atrapada en escenas que no terminan de tener sentido, diciendo frases que suenan vacías y actuando de una forma que no conecta con ninguna emoción.
Me parece terrible cómo se nos muestra a las mujeres ya que se supone que esta película habla de libertad, de deseo, de romper con las normas pero con lo que nos encontramos es con un personaje femenino que empieza siendo una mujer fuerte, independiente y que poco a poco se va desdibujando hasta quedar convertida en alguien patético, confuso y ridículo incluso.
Me ha costado encontrar algo a lo que aferrarme, pero bueno, diría nuevamente que la estética está bien, la intención también, pero le falta alma, le falta una historia que diga algo de verdad, que arriesgue de verdad, que no se limite a repetir fórmulas sin cuestionarlas, porque lo que Babygirl propone como libertad se parece demasiado a un vacío disfrazado de glamour y eso, más que provocador, resulta desolador.





María Callas






Título original: Maria 
Año: 2024
Duración: 123 min.
País: Italia
Dirección: Pablo Larraín
Guion: Steven Knight
Fotografía: Edward Lachman
Reparto:



La película se centra en los últimos días de vida de Callas en el París de los años 70, donde, recluida en su apartamento, reflexiona sobre su tumultuosa vida y carrera, incluyendo la que tuvo con Aristóteles Onassis y su lucha con la soledad y el deterioro de su salud, mientras el mundo la recuerda por su prodigiosa voz.












Vermiglio





Año: 2024
Duración: 119 min.
País: Italia
Dirección: Maura Delpero
Guion: Maura Delpero
Música: Matteo Franceschini
Fotografía: Mikhail Krichman
Reparto:
Tommaso Ragno, Giuseppe De Domenico, Roberta Rovelli, Carlotta Gamba, Sara Serraiocco...


Ambientada en 1944, en el remoto pueblo alpino de Vermiglio, al norte de Italia, la historia se centra en la familia Graziadei, liderada por Cesare, el maestro local. La llegada de Pietro, un soldado siciliano desertor, altera la rutina familiar, especialmente al enamorarse de Lucía, la hija mayor.


Este acontecimiento desencadena tensiones internas que reflejan las transformaciones sociales y culturales de la época.





Gran Premio del Jurado en el Festival de Venecia 2024





Vermiglio me ha dejado una sensación difícil de explicar... no es un drama bélico al uso, la guerra es una presencia constante, como un telón de fondo que todo lo condiciona, pero no es el centro de la historia, porque el centro son las personas, especialmente las mujeres, mujeres atrapadas en una sociedad cerrada, marcada por el machismo, la religión, el aislamiento y la rutina de lo rural.
Maura Delpero consigue retratar ese mundo con gran delicadeza, sin recurrir al dramatismo y lo que vemos es el día a día de una comunidad que sobrevive como puede en una época dura, con la guerra apenas a unos kilómetros y la represión mucho más cerca, metida en las casas, en las costumbres, en las miradas.
Lo que más me ha gustado es cómo logra hablar de tantas cosas sin decirlas directamente. El patriarcado, la maternidad, la culpa, la religión, el deseo, la muerte, la pobreza... están presentes, pero en forma de susurros, de gestos, de silencios. Es una película que te obliga a estar atenta continuamente, por eso también entiendo que pueda llegar a hacer desconectar a quienes buscan un ritmo más ágil o una historia más marcada ya que aquí todo es muy sutil, todo es lento, todo es contenido y a veces todo ello hace que te cueste mantener la atención.
La fotografía es preciosa por su forma de capturar esa región montañosa del norte de Italia, con su luz gris, su nieve, su silencio. Se respira frío, se respira soledad, se respira rutina y eso contribuye mucho a que entres en la atmósfera.
Me ha parecido muy interesante cómo se aleja del típico relato de la guerra para centrarse en esas pequeñas tragedias que la guerra deja en los márgenes. La pérdida, la ausencia, la maternidad vivida en soledad, el deseo reprimido... todo eso está presente, pero con una contención que a veces duele más que si se mostrara abiertamente.
Vermiglio es una película exigente, no por compleja, sino porque requiere paciencia pero si te dejas llevar, si entras en su ritmo y aceptas su tono austero, puede resultar muy interesante. Una película que habla de mujeres invisibilizadas, de vidas pequeñas que en realidad son enormes, de resistencias silenciosas en medio del ruido de una época que no dejaba lugar para la libertad.






Memorias de un caracol






Título original: Memoir of a Snail
Año: 2024
Duración: 94 min.
País: Australia
Dirección: Adam Elliot
Guión: Adam Elliot
Música: Elena Kats-Chernin
Reparto:
Sarah Snook, Kodi Smit-McPhee, Eric Bana, Magda Szubanski, Dominique PinonJacki Weaver...



Grace Pudel es una niña solitaria que vive en el Melbourne de los años 70 con su hermano gemelo Gilbert y su padre Percy. Tras la muerte de su padre, los hermanos son separados y enviados a hogares adoptivos diferentes.

Grace, marcada por la pérdida y la soledad, desarrolla una obsesión por coleccionar objetos relacionados con caracoles. A lo largo de su vida se enfrenta a diversas adversidades, incluyendo relaciones complicadas y la pérdida de seres queridos, pero también encuentra momentos de conexión y esperanza.





Premio al Mejor Largometraje de Animación en el Festival Internacional de Cinema de Catalunya - Sitges 2024


Premio al Mejor Film Internacional en el Festival de Göteborg 2025
Premio Cristal al Mejor Largometraje en el Festival de Annecy 2024
Premio del Cine Australiano 2024 a la Mejor Actriz para Sarah Snook
Premio del Cine Australiano 2024 a la Mejor Actriz de Reparto para Jacki Weaver
BFI London Film Festival 2024 a la Mejor Película





Termino de ver Memorias de un caracol con el corazón tocado porque me he dado de frente con una de esas películas que llegan sin hacer ruido y acaban quedándose muy dentro de una. No sabía bien qué esperar y tal vez por eso me ha sorprendido tanto.
Está hecha en animación stop motion —una técnica que ya de por sí tiene algo entrañable y frágil— y cuenta la historia de Grace, una vida marcada por la diferencia, por la pérdida, por la soledad… y también por momentos de ternura, de absurdo y de alegría inesperada. Adam Elliot tiene ese don de hablar del dolor sin recrearse en él, de mostrar la tristeza sin caer en el drama fácil y en esta película hay muerte, hay abandono, hay bullying, hay fanatismo, pero también hay humor, compasión y una humanidad que consigue emocionarte de verdad.
Técnicamente es una joya. El stop motion de Elliot tiene algo muy especial: sus personajes, modelados a mano con todas sus imperfecciones visibles donde cada arruga, cada gesto, está cuidado con tanto detalle que a veces se te olvida que estás viendo figuras de plastilina. Los escenarios son preciosos, con esos tonos ocres y apagados que, a medida que avanza la historia, se van iluminando poquito a poco, como el corazón de Grace y además todo está hecho sin efectos digitales, totalmente artesanal y eso se nota y se agradece en cada plano.
Me gustaría destacar también la maravillosa banda sonora en la que la magia y las emociones están en cada una de sus notas.
La narración tiene ese tono entre tragicómico y poético que me encanta. A ratos me he reído, a ratos se me hizo un nudo en la garganta y al finalizar la película no he podido contener las lágrimas. Es verdad que es una película triste, pero también es profundamente esperanzadora, porque Grace es uno de esos personajes que no se olvidan facilmente, con sus frases, sus silencios, su forma de ver la vida.
Es una película especialmente recomendable para quienes alguna vez nos hemos sentido raros, fuera de lugar, distintos, para quienes caminamos lento, pero seguimos, muchas veces no sabemos ni quiera cómo, bueno, quizás si... como los caracoles.
Memorias de un caracol es una película preciosa, sencilla en apariencia, pero con una profundidad brutal y sinceramente me cuesta entender cómo no se está hablando mucho más de ella, porque no estamos hablando solo de cine, sino del alma. Y de este tipo de películas, que te traspasen el alma no hay muchas.

"La vida me ha golpeado un poco, pero las rosas huelen mejor y finalmente me estoy convirtiendo en la persona que siempre quise".

"La vida solo podemos entenderla al revés, pero debemos vivirla hacia adelante".





domingo, 20 de abril de 2025

La luz que imaginamos






Título original: All We Imagine as Light
Año: 2024
Duración: 118 min.
País: India
Dirección: Payal Kapadia
Guion: Payal Kapadia
Música: Dhritiman Das y Topshe
Fotografía: Ranabir Das
Reparto:
Kani, Divya Prabha...



La película nos sumerge en la vida de tres mujeres que trabajan en un hospital de Mumbai: Prabha, Anu y Parvaty. Prabha, una enfermera reservada, recibe inesperadamente un regalo de su esposo, quien la abandonó tras un breve matrimonio arreglado y vive en Alemania.

Anu, su joven compañera de piso, mantiene una relación secreta con Shiaz, un hombre musulmán, enfrentando las restricciones sociales y culturales de su entorno. Parvaty, la cocinera del hospital, lucha por conservar su hogar ante la amenaza de desalojo por parte de promotores inmobiliarios.​


La historia se desarrolla entre la bulliciosa ciudad de Mumbai y un tranquilo pueblo costero, donde las protagonistas buscan un espacio para reconectar consigo mismas y entre ellas.





Gran Premio del Jurado en el Festival de Cannes 2024
Premio TVE "Otra mirada" 2024 del Festival de San Sebastián | Zinemaldia
Premio del Círculo de Críticos de Nueva York 2024 a la Mejor Película Extranjera
Premio de la Asociación de Críticos de Los Ángeles (LAFCA) 2024 a la Mejor Película Extranjera


Gotham Independent Film Awards 2024 a la Mejor Película Internacional
Premio de la Asociación de Críticos de Chicago 2024 a la Mejor Película Extranjera





Tenía ganas de ver La luz que imaginamos de Payal Kapadia una directora que nos presenta una película en la que deja que el tiempo pase, que las imágenes hablen y que el silencio se acomode entre escena y escena. Es verdad que me atrapó su arranque, con una fuerza emocional que parecía prometer mucho y esa primera parte, sólida y sugerente, me hizo pensar que iba a asistir a una historia más potente, pero con el paso de los minutos, la historia va perdiendo pulso. No desaparece el interés, pero sí se desdibuja un poco y se vuelve más contemplativa, más íntima, más onírica… y también, en algunos momentos, más pesada.
Kapadia pone el foco en tres mujeres muy distintas, pero unidas por una misma sensación: la de sentirse atrapadas en una libertad que no es real. Están en un mundo que les dice que pueden elegir, que pueden decidir su camino, pero a la vez les marca el ritmo, las normas, el qué y el cómo. Cada una de ellas representa una forma diferente de vivir esa contradicción: adaptarse, rebelarse o simplemente resistir y en medio de todo esto, hay apoyo, complicidad, miradas cómplices que sostienen más que muchas palabras.
La actuación de Kani Kusruti como Prabha me ha parecido maravillosa y me gustó mucho también cómo la cámara se mueve por Bombay, donde a veces parece una ciudad que te abraza y otras veces una que te aplasta.
Reconozco que hay una belleza especial en cómo está rodada. La fotografía de Ranabir Das y la mirada de Kapadia logran mostrarme una India que no conozco, con sus contrastes, con su poesía, con esos recorridos por la ciudad, esos momentos en que los personajes se pierden entre la multitud o se encuentran en la intimidad de un vagón de tren, me parecieron de lo mejor de la película. Pero también tengo que decir que hay partes que me costaron digerir y que ha habido algún rato en el que desconecté debido principalmente a su ritmo, tan pausado y a que no encontré esos momentos de intensidad que te devuelven la atención cuando te estás yendo.
Lo que más me ha gustado es la forma en que se cuenta la historia. Esa sutileza, esos silencios, esa manera de mostrarnos la dignidad de unas mujeres que incluso cuando dudan, incluso cuando flaquean, siguen caminando, aunque sea solo en busca de esa luz que imaginan.
No diría que es una gran película, porque creo que le falta algo para serlo. Le falta cerrar mejor algunas historias, darle más espacio a dos de esas tres mujeres, que acaban un poco diluidas pero sí que es una película especial, de las que te despiertan sensaciones que no puedes explicar y a veces, eso ya es suficiente.






Robot salvaje






Título original: The Wild Robot
Año: 2024
Duración: 98 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Chris Sanders
Guión: Chris Sanders
Música: Kris Bowers
Reparto:
Lupita Nyong'o, Pedro PascalKit ConnorStephanie Hsu, Mark Hamill, Catherine O'HaraBill Nighy, Matt Berry, Ving Rhames...



Roz es una robot de servicio (unidad ROZZUM 7134) que tras naufragar, queda varada en una isla deshabitada. Para sobrevivir debe adaptarse al entorno salvaje, aprendiendo a convivir con la fauna local y formando lazos con los animales que habitan la isla.


Su viaje la lleva a convertirse en la madre adoptiva de un ganso huérfano llamado Brightbill.





Premio del Sindicato de Productores (PGA) 2025 a la Mejor Película de Animación
Critics Choice Awards 2025 al Mejor Largometraje de Animación
Premio Annie 2024 a la Mejor Película
Premio Annie 2024 a la Mejor Dirección
Premio Annie 2024 a la Mejor Animación de Personajes
Premio Annie 2024 al Mejor Diseño de Producción
Premio Annie 2024 al Mejor Doblaje para Lupita Nyong'o
Premio Annie 2024 a la Mejor Música
Premio Annie 2024 al Mejor Montaje
Premio Annie 2024 a los Mejores Efectos Animados
Saturn Awards 2025 al Mejor Film de Animación













Twisters






Año: 2024
Duración: 128 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Lee Isaac Chung
Guion: Mark L. Smith 
Fotografía: Daniel Mindel
Reparto:
Daisy Edgar-Jones, Glen PowellAnthony Ramos, David Corenswet, Katy O'Brian, Kiernan Shipka, Sasha Lane, Maura Tierney, Daryl McCormack, Brandon Perea, Harry Hadden-Paton, Nik Dodani, Tunde Adebimpe...




Kate Cooper (Daisy Edgar-Jones) es una ex cazadora de tormentas que tras una tragedia personal, se ve envuelta nuevamente en la persecución de tornados en Oklahoma.


Acompañada por Tyler Owens (Glen Powell), una estrella de las redes sociales y Javi (Anthony Ramos), su antiguo colega, Kate se enfrenta a fenómenos meteorológicos extremos mientras lidia con sus propios demonios internos.






Tenía curiosidad por ver Twisters o más bien por cierta nostalgia de la película de los 90 para ver qué podía hacer alguien como Lee Isaac Chung con una historia de tornados y en principio solamente esperaba pasar un buen rato. Esta película sigue más o menos la misma fórmula de la primera, pero sin ese encanto fresco que tenía entonces y el problema quizás no es tanto que repita la estructura, sino que lo hace con menos alma.
Desde el principio queda claro que esta es una de esas películas que no se andan con rodeos: tornados, truenos, coches volando, gritos y más tornados. La acción está bien rodada, los efectos especiales están cuidados y hay momentos que visualmente impresionan de verdad. El sonido también ayuda a crear tensión, al menos al principio, aunque con el paso del tiempo todo se vuelve tan exagerado y tan ruidoso que termina saturando.
La historia intenta mezclar acción, drama y algo de comedia, con ese aire de película coral donde todos tienen un pasado complicado o alguna deuda emocional pendiente, pero, sinceramente, cuesta conectar con la mayoría de los personajes. Hay buenas intenciones, se nota que han querido meter algo de humanidad en medio de tanto desastre, pero no termina de funcionar.
La banda sonora me pareció uno de los mejores aciertos. Benjamin Wallfisch firma una partitura que encaja bien con la épica de algunas escenas y los temas country le dan ese aire de tierra adentro, de raíces, que combina con el escenario del Medio Oeste americano.
Twisters es un entretenimiento aceptable, con escenas espectaculares y un ritmo bastante sostenido pero también es una película que no sabe cuándo parar y que se repite a sí misma. No es que sea un desastre, ni mucho menos, pero tampoco consigue emocionarte o al menos a mí no me ha emocionado. Es el tipo de película que te mantiene sentada, pero que a las horas, posiblemente ya no te acuerdes de ella. Se agradece que esté bien hecha, claro, pero podría haber transmitido mucho más si hubiera tenido un poco más de corazón.