Año: 2025
Temporadas: 1 temporada (6 episodios)
País: España
Dirección: Leticia Dolera
Guion: Leticia Dolera y Almudena Monzú
Música: Alfred Tapscott
Reparto:
Leticia Dolera, Xavi Sáez, Carla Quílez, Vicky Peña, Betsy Túrnez, Biel Durán, David Vert, Anna Alarcón, Luis Marco...
Cuando una denuncia de agresión sexual explotada en redes sociales señala a tres adolescentes como presuntos responsables, la aparente armonía de una comunidad catalana especializada en la tradición de los castells se desmorona.
Siguiendo desde distintos puntos de vista —la víctima, los acusados, los padres, los adultos implicados— la serie explora quién es realmente responsable, si un menor puede cometer un acto tan grave, o si la culpa recae también en la familia, la cultura popular, la educación o la sociedad.
Premio Ondas 2025 a la Mejor Serie de Drama
Pubertat, la nueva serie de Leticia Dolera, me ha parecido una propuesta interesante y sin duda, necesaria. Rodada en catalán y basada en un trabajo de documentación muy sólido con expertos en sexualidad adolescente, violencia sexual y educación afectiva, aborda un tema que pocas series se atreven a tocar y desde el primer episodio se nota que Dolera no busca el morbo ni el drama fácil, sino abrir un espacio de reflexión, casi de incomodidad, sobre cómo reaccionamos ante una agresión sexual dentro del propio entorno familiar. La serie te enfrenta sin rodeos a la pregunta de qué haríamos si el problema estuviera más cerca de lo que quisiéramos admitir y esa es precisamente su mayor fuerza.
La serie propone la justicia restaurativa frente al castigo penal y además nos obliga a pensar en cuánto pesan realmente nuestros ideales cuando la vida los pone a prueba. Pubertat no solo habla de los adolescentes, también de los adultos que los rodean, de nuestros silencios, de los errores que arrastramos desde nuestra propia pubertad y hace que nos miremos al espejo e intentemos hacerlo honestamente.
Narrativamente, es cierto que a veces le falta un poco de fuerza o que algunas escenas podrían haber sido más directas, más contundentes, pero aun con esas limitaciones, el mensaje llega claro.
Dolera vuelve a demostrar que tiene una mirada muy personal, sensible y comprometida y la serie nos hace reflexionar y pensar en como la educación afectiva, la escucha y la empatía siguen siendo nuestras mejores herramientas para hacernos mejores como sociedad.












